Productividad laboral

¿Cómo afecta el clima laboral a la productividad?

Tener un buen clima laboral en la empresa está directamente relacionado con la productividad laboral de los empleados. Descubre cómo.

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Marcos Lopez

HR Consultant

productividad y clima laboral

13 de enero, 2022

La productividad laboral es un compendio de factores. Entre ellos están los objetivos con los que se trabaja, la actitud de cada trabajador, los recursos con los que cuenta, el liderazgo del equipo de trabajo o el entorno. Y la suma de todos ellos da lugar al clima de trabajo. El ambiente en que se desarrolla el trabajo tiene una clara incidencia sobre la productividad empresarial. Lógicamente, cuanto mejor sea el clima laboral, mayor será la productividad obtenida por la plantilla y los equipos de trabajo, por ello es importante medir el clima laboral de manera recurrente.

Ambiente de trabajo y productividad laboral

Todos sabemos cómo se calcula la productividad, tenemos nuestros indicadores para ello. Pero… ¿qué pasa con el clima laboral? Igual que pasa con la productividad empresarial o el rendimiento laboral, deberíamos contar con una serie de encuestas de clima laboral. Vaya por delante que la creación de un ambiente de trabajo positivo es cosa de todos los trabajadores de la plantilla. La dirección de la empresa o el equipo de recursos humanos deben favorecer las condiciones más óptimas, pero también los líderes de equipo o los propios trabajadores.

El desarrollo de un buen ambiente de trabajo tiene dos factores. En primer lugar están las condiciones físicas en que se desarrolla el trabajo. Cuestiones como la iluminación, ventilación o distribución de los espacios influirán en mayor o menor medida sobre el ambiente de trabajo. El segundo factor está ligado a las relaciones interpersonales entre todos los implicados. Hace referencia a cuestiones como el liderazgo, la confianza entre trabajadores, con el jefe y viceversa o el respeto entre todos ellos.

Clima laboral, una inversión rentable

No son pocos los casos de empresas que renuncian a trabajar el ambiente de trabajo debido al alto coste que tiene. Es innegable que construir un buen ambiente de trabajo exige una inversión que en muchos casos puede ser importante. Pero también es cierto que invertir en una mejora del clima laboral siempre es rentable. Si hacemos balance, las pérdidas generadas por el mal ambiente de trabajo (errores de producción, bajo rendimiento laboral, absentismo, alta rotación de trabajadores) siempre son superiores a la inversión que haremos en mejorar el ambiente.

El hecho de generar un entorno de trabajo amigable permite a los trabajadores desarrollar su potencial al máximo. Para que un trabajador de la mejor versión de sí mismo, necesitará que se den las condiciones adecuadas. Si no es así, no tiene las herramientas de productividad adecuadas o el liderazgo no es correcto, estaremos desperdiciando talento. El capital humano es el recurso más importante de cualquier empresa, y tener una plantilla feliz y motivada es el primer paso hacia una buena productividad.

5 claves en la relación clima – productividad laboral

Para comprender mejor la estrecha relación entre el ambiente de trabajo y el rendimiento laboral de nuestra plantilla, te proponemos las 5 claves que explican un clima laboral productivo. Son esos aspectos que nos revelan un entorno de trabajo amigable donde los trabajadores se pueden desarrollar al máximo:

  1. Comunicación interna: si el ambiente es bueno, los trabajadores podrán expresar su opinión libremente, sin miedo a represalias. La dirección también será transparente con ellos, lo que permite reforzar el compromiso con la misión, objetivos y valores de la empresa. Los trabajadores saben qué se espera de ellos.
  2. Participación: una buena comunicación también favorece que se involucren en los proyectos de la empresa. El hecho de que los trabajadores se sientan parte del grupo ayudará a cumplir metas y salvar los obstáculos que surjan. Estarán orgullosos de formar parte de ese todo que es la empresa.
  3. Respeto: decíamos antes que es uno de los pilares del buen ambiente laboral. Respetar a los demás, su trabajo y opiniones, facilitará la resolución de las diferencias que inevitablemente surjan. Si no hay respeto, no será fácil pasar ocho horas trabajando junto a alguien.
  4. Reconocimiento: va de la mano del respeto. La dirección debe reconocer los logros de todos sus trabajadores, de modo que la plantilla se sienta valorada. También es importante ofrecer confianza a quienes no han logrado el reconocimiento para que mejoren.
  5. Competitividad: reconocer los logros de los trabajadores ayuda a mantenerlos motivados para alcanzar los objetivos. Esto se traduce en un mayor rendimiento laboral, siendo la empresa más competitiva. También permite favorecer la competitividad a nivel interno, una competencia que siempre es sana.

Cómo mejorar el clima laboral

Está claro que si quieres mejorar la productividad de tu empresa será necesario mejorar el ambiente de trabajo. Para ello, las encuestas de clima laboral son nuestro mejor aliado. Por una parte, nos permiten identificar los aspectos mejor valorados por la plantilla y aquellas cuestiones donde la empresa tiene margen de mejora. Por otra parte, permiten a los trabajadores lanzar sus propuestas para mejorar el ambiente de trabajo. Escuchar a los trabajadores y responder a sus solicitudes es esencial para mantenerlo motivados.

Con el software de rrhh de Sesame HR puedes desarrollar tus cuestionarios de clima laboral y obtener un feedback al instante y en tiempo real. También conviene destacar el gestor de tareas que ofrece. Un buen reparto del trabajo es esencial para ejecutar un liderazgo que permita a los empleados desarrollar al máximo su potencial. Cuestiones como la flexibilidad horaria también pueden favorecer un buen ambiente de trabajo. De nuevo Sesame HR se presenta como la mejor opción para llevar el control horario.

Confiar en la plantilla y no tener miedo a sus ideas, por novedosas que parezcan, permitirá mejorar el clima laboral. Muchas empresas descartan buenas propuestas porque vienen de abajo, pero las ideas de los trabajadores pueden repercutir positivamente en la productividad laboral de la organización. Al fin y al cabo, ellos conocen mejor que nadie las necesidades que tiene la empresa. En ocasiones, arriesgarse tiene un resultado más que positivo para la empresa.


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