Productividad laboral
Tipos de ambiente laboral en empresas
Conoce cuáles son los tipos de ambiente laboral que existen dentro de una empresa y cómo se pueden diferenciar fácil y rápidamente.
Productividad laboral
Conoce cuáles son los tipos de ambiente laboral que existen dentro de una empresa y cómo se pueden diferenciar fácil y rápidamente.
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Marcos Lopez
HR Consultant
22 de julio, 2022
En una empresa, la manera en la que trabajamos es tan importante como la propia tarea que se realice. El tipo de ambiente laboral predominante determina no solo cómo se encuentren los empleados, sino incluso su productividad. Desde Sesame HR te invitamos a descubrir los tipos de ambiente laboral en una empresa. Además, cómo este puede ser clave en diferentes aspectos.
También conocido como el clima laboral, es la manera en la que se desempeña una actividad. Cada empresa genera, a veces de forma inconsciente, un ambiente laboral diferente. Por eso, tener el adecuado es más importante de lo que parece. ¿Alguna vez has trabajado en una empresa sin estar a gusto? Quizás las condiciones económicas eran buenas, pero había algo que no terminaba de gustarte. Sí, el tipo de ambiente laboral es capaz de arruinar una carrera dentro de una empresa.
Generalmente, hay una clasificación de tipo de ambiente laboral ya definida, si bien admite variaciones. Tipos de ambiente laboral más habituales.
Este tipo de ambiente laboral el propio de empresas muy jerarquizadas. Mucho cuidado con confundir jerarquía con autoridad. La primera es necesaria para determinar la cadena de mando. La segunda ya no tiene ese carácter positivo. Este tipo de clima laboral se caracteriza porque las órdenes van de arriba abajo y no hay discusión. Centran en la figura del jefe o jefa el ambiente. No hay discusiones a la hora de ejecutar órdenes y a comunicación de abajo a arriba es inexistente o improbable. Es un ambiente negativo.
Además de ser negativo, se tiene la sensación de que se te perdona todo. Quien manda asume el rol de proteccionismo en cada momento. Los empleados perciben esto, en ocasiones, como un salvavidas. Estás ahí porque se te permite estar, y tus jefes son los que toman las decisiones. Las diferencia con el autoritario es que la cadena de mando tiene estructuras intermedias.
Las decisiones siguen siendo cuestión de los equipos directivos. Sin embargo, hay más capacidad de consulta. Se considera a los empleados y se les tiene en cuenta. Es un ambiente positivo, ya que el trabajador percibe que su opinión vale. Este tipo de ambiente es más proactivo y capaz de trabajar en equipo, por el hecho de que se busca un bien común.
Basado en la confianza, la jerarquía no es vertical, sino horizontal. Todas las decisiones se toman en conjunto, y la consideración es máxima. Cualquiera puede aportar algo positivo y relevante que busca la consecución de objetivos. Podemos decir que es el modelo de tipo de trabajo que queremos desempeñar. Es el que obtiene el mejor retorno de la inversión.
Esta es la clasificación clásica, si bien podríamos añadir o realizar variaciones de estos roles. Desde las empresas con ambiente anárquico, en el que el «sálvese quien pueda» es lo que impera, al fiscalizador, donde todo se mira con lupa. El clima laboral emprendedor también es habitual y suele estar en alza, busca la iniciativa y conseguir objetivos.
A la hora de modelar el ambiente laboral, muchas veces intervienen factores diversos como la estructura o el concepto que se tenga de trabajo. Generalmente, podemos hacer la siguiente clasificación de factores:
– Estructurales: el clima viene determinado por la jerarquía de la empresa.
– Organizativos: relacionado con el anterior, el tipo de ambiente se genera dependiendo de los diferentes departamentos.
– Sociales: las relaciones entre los trabajadores modelan el ambiente, para bien o mal.
– Personales: nuestra relación propia con la empresa y con los demás. Un ambiente laboral puede ser positivo, pero nosotros no estamos a gusto.
Podemos pensar en gran cantidad de ellas. Por un lado, que la productividad será inadecuada, porque no se trabaja a gusto. En los tipos de ambiente autoritarios, el miedo hace que no se trabaje con ilusión. La espada de Damocles de tener siempre encima a los jefes genera desconfianza. También mina la autoestima. Puede darse incluso algún caso curioso. El ambiente es positivo, pongamos que consultivo, pero en unas circunstancias no permite conseguir esos objetivos. Habría que dar un giro a otro modelo que, sin ser negativo, marcase muy bien las pautas a seguir.
Quien trabaja en una empresa con ambiente laboral negativo no va a poder dar lo mejor de sí, y tarde o temprano terminará quemado. Muchas veces esto ocurre por tener que asumir tareas que no corresponden o la sensación de no valer nada laboralmente.
Esta tarea de todos, pero principalmente de los equipos directivos. Invertir en la masa social de la empresa es lo mejor que puede hacerse para mejorar el tipo de ambiente laboral.
Una ronda de consulta con los empleados puede mejorar la comunicación interna. Además, da unas pautas de qué está fallando y qué podría hacerse para mejor. Así que, sondear a quienes soportan y mantienen la empresa es una tarea más que importante.
Redefinir los roles de los empleados si es preciso, además del de los mandos intermedios, puede terminar de dar el giro necesario para que el ambiente laboral mejore. No se trata de generar una sonrisa forzada, sino de dar a cada uno lo que corresponde.
Seguro que este artículo ha sacado mucho de tu experiencia propia. Y es que en Sesame HR no paramos de pensar en cómo son las empresas y cómo pueden funcionar mejor. Nuestro software de rrhh tiene el objetivo de mejorar la organización y dar con una productividad mejorada. No dejes de consultar nuestros artículos para que puedas estar al tanto de todo lo que ocurren en el mundo corporativo. ¿Has visto lo importante que es el tipo de ambiente laboral que exista en una empresa?